A mi piña, por llorar de la risa.

DE: LA CUARTA

PARA: MI PIÑA

Gracias hermanas por esa risa fácil, floja, tonta, de llorar sin poder parar (pero llorar de verdad ademas todas nos reímos igual, como papá, de no poder hablar). No somos de risa de carcajada escandalosa, pero si de ponernos súper rojas y llorar. Y que se retroalimenta cuando nos intentamos poner serias. No hace falta mucho, nos da a veces solo con mirarnos, o con el comentario de alguna de nosotras o de una situación que por mucho que queramos involucrar a otros, nunca les va a parecer tan gracioso y te miran con cara de "más tontas y no nacen".

Esos son mis momentos favoritos.